martes, 30 de octubre de 2012

matriarcado



El matriarcado no es una organización social utópica ni del pasado. Los antropólogos los buscan como formas opuestas al patriarcado, por lo que jamás los encontrarían;  
el feminismo no es el opuesto al machismo, esto es lo mismo.

Un claro ejemplo de sociedad matriarcal son Las Musuo, situadas en torno al lago Lugu, entre las provincias de Yunnan y Sichuan, en el sudoeste de China.

La unidad familiar gira entorno a las madres; hijos, sobrinos, tíos, abuelos y primos viven con ellas y son criados entre todas. La familia es independiente de las relaciones sexuales o amorosas. Es impensable que el amor romántico, fugaz y volatil, sea la base de los núcleos familiares, y esto logra una libertad profunda a la hora de elegir sus relaciones. 

Las jóvenes Mosuo poseen un cuarto propio llamado cuarto de las flores (Babahuago), con acceso al interior de la vivienda y con puerta al exterior. Las muchachas deciden dejar pasar a sus parejas sexuales o románticas, distintos amantes o siempre el mismo. Los hijos que concibieran serían criados por la familia materna, siendo el único padre biológico que existe el hermano de la madre. La plena libertad sexual de las mujeres, sin un acuerdo de fidelidad, impide que los hombres controlen si los embarazos son causados por ellos. El patriarcado emplea exactamente ese control sexual para asegurar la continuidad a través de la herencia de su propiedad privada. 

La responsabilidad con la comunidad, como es el trabajo, la sustentan las mujeres. Las madres preservan el bienestar del pueblo porque el pueblo son sus hijos. La toma de decisión es consensuada por hombres y mujeres, pero las grandes decisiones que generalmente recaen en los hombres como construir un cerco, un canal, o hacer un viaje no son consideradas importantes. Las decisiones que tienen que ver con el cuidado y la crianza son las que poseen un mayor valor.

Es llamativo el rechazo a la violencia. Ser agresivo no es viril, es vergonzante. Los celos, como muestra de dominación, son inaceptables. No se permite vulnerar la libertad sexual individual de nadie.

Resaltar también la no cabida del capitalismo en estas estructuras, y el cuidado y respeto por la tierra. Las Mosuo veneran el lago Lugu como Diosa Madre y a la montaña Ganmo como Diosa del amor.






Matriarcado como única alternativa




2 comentarios:

  1. El cuarto de las flores..., me gusta mucho el nombre y la libertad que supone para las mujeres

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  2. mmmm... interesantísimo. Gracias por compartir!

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